El coronavirus y Speedy Gonzales

Una mañana camino del colegio, Nacho, el hijo de mi compañera, de siete años, le soltó a su madre: “mamá mañana me voy a Alemania, que allí no hacen deberes”. A su ocurrencia le agradezco unas buenas carcajadas y el haberme hecho pensar.

En la vida cotidiana los padres sostienen una lucha permanente para tratar de que sus hijos lleguen con puntualidad al colegio, a las clases extra-escolares, o para que hagan los deberes. Podemos intentar buscar causas profundas a este conflicto cotidiano, pero el razonamiento por simple, es mas que evidente: ellos preferirían disponer de su tiempo de forma más libre y no tener que someterse a una agenda, que se parece sospechosamente a nuestras agendas de adultos. Y aunque estoy de acuerdo en que hay que estimular a nuestros hijos, creo que ahora nos toca a nosotros hacer un ejercicio de aprendizaje y autocrítica. Los niños, con esa capacidad de vivir en el aquí y el ahora, y ese sentido común tan básico, ponen a veces en evidencia el planteamiento tan sofisticado de vida que nos hemos montado.

Una pregunta muy simple: ¿Por qué vamos a todos los sitios corriendo y tenemos la sensación de no llegar a todo, de no terminar la interminable lista de cosas que nos habíamos propuesto? Creo que las pautas de organización del tiempo que hemos aprendido (y he de reconocer que he entrenado a muchos en esta materia), se han vuelto en nuestra contra. Marca objetivos y prioridades, se efectivo, saca partido al tiempo, calcula cuanto te va a llevar lo que tienes que hacer y programa una tarea a continuación de la otra, aprovecha los trayectos en coche para hacer llamadas, teclea un mensaje mientras haces cola… y sobre todo, evita la procrastinación. Una palabra que suena a enfermedad, y que nos relata los riesgos de pasar las cosas de un día para el siguiente.

Somos tan ambiciosos con el tiempo que nos sobrecargamos hasta proponernos un programa inalcanzable. Tratamos de hacer en un tiempo récord una cantidad ingente de gestiones, desplazamientos, compras, llamadas, etc. Me viene a la cabeza una imagen de animación de mi infancia (que por cierto, veía frente al televisor, con un bocadillo de Nocilla, deleitándome, sin la más mínima noción del hasta cuándo o el para qué): Speedy Gonzales, el ratón más rápido, era capaz de jugar al tenis contra sí mismo. Imposible pero ambicioso. Por eso, a este comportamiento tan común en nuestro tiempo, le llamo el síndrome de Speedy Gonzales.

¿Y qué es ser “efectivo”? Desde luego, estar de mal humor porque te has pasado el día corriendo no lo parece, al menos para la salud. Y hacer de la agenda un auténtico sudoku, podrá ser rentable en ciertos términos, pero te lleva a perderte infinidad de cosas que suceden (o podrían suceder) si mirases a tu alrededor, o a tu interior.

Nos encontramos ahora mismo en un momento sin precedentes. En casa, sin poder salir, con menos carga de trabajo, sin horarios o con un horario muy laxo. No nos hemos visto en otra igual. Si alguna vez dijiste, que se pare el mundo, que yo me bajo, has visto cumplido tu deseo. Nos han bajado a todos de mundo tal y como lo conocíamos.

Algunos están tratando de reproducir la misma agenda dentro de su nueva condición de «cautividad». Mi propuesta es otra diferente: DESORGANÍZATE. Elimina algunas tareas de la agenda, haz las cosas más despacio, déjate tiempo para observar lo que pasa a tu alrededor, mira, huele, siente, observa, respira. Suelta el móvil. Si puedes, deja de hacer alguna cosa que no te apetezca, porque puede que tu intuición o tu cuerpo te estén avisando de algo, escúchalo. Baja el ritmo. Acepta lo inesperado porque a lo mejor esconde alguna perla. No serás más «efectivo», pero sí más feliz.

Gracias Nacho, nos vemos en Alemania.
Noemi Galindo Vallejo

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: